Nueva licitación de la ruta 68: ¿Otra oportunidad perdida para Valparaíso y Casablanca?

Por: Esteban Vega T, Candidato a Diputado distrito Nº7.

El año 2019, el Ministerio de Obras Públicas informó a la opinión pública que durante el año 2021 se realizaría la segunda licitación de la Ruta 68, carretera que conecta nuestra región de Valparaíso con Santiago y la Región Metropolitana en general.

Hasta el momento, no hemos tenido mayor información de la manera como piensa el MOP diseñar la nueva carretera, salvo lo señalado en su página web, pero sí hemos sabido de algunas informaciones que nos preocupan. La licitación corresponde al mejoramiento de la actual Ruta 68, en el tramo comprendido entre la estación de Metro Pajaritos, en la comuna de Pudahuel, y el enlace La Pólvora, ubicado en el sector poniente de Placilla, con una extensión total de 99,30 km.

El proyecto considera la ampliación a terceras pistas hasta el peaje Lo Prado (km 17 aproximadamente) y el mejoramiento necesario para que el trazado de la vía sea concordante con la velocidad de circulación. Desde el km 17 hasta el km 99,80 se proyectará una nueva calzada con dos pistas emplazada de forma paralela y adyacente a la ruta actual. Asimismo se contempla el desarrollo de dos nuevos túneles en Lo Prado y Zapata y el reemplazo de los puentes sobre el Río Mapocho y el estero Pudahuel.

A los anterior se suma el estudio de la continuidad de las calles locales existentes y la implementación de nuevos tramos de éstas, rehabilitaciones de pavimentos donde sea necesario, nuevos enlaces, rectificaciones de trazado, puntos de retorno y pasarelas con estándares de accesibilidad universal.

Entre los beneficios de esta obra destaca mejorar el estándar de una ruta altamente demandada no sólo por autos particulares, sino que también por vehículos pesados que la utilizan para el intercambio comercial.

Según el MOP, el llamado a licitación debería salir en el cuatro trimestre de este año, lo que evidente nos preocupa, debido a la poca información existente. De lo que sabemos, es que el arreglo llegará hasta el enlace La Pólvora, dejando de lado los 17 kilómetros que van desde el enlace La Pólvora hasta la Avenida Argentina, en una de las rutas más transitadas y que más problemas le genera a la ciudad por los numerosos accidentes que se producen en la bajada Santos Ossa, lo que es muy conocido por los porteños.

Por todos es sabido la grave crisis que enfrenta la ciudad de Valparaíso. Este proyecto, que incluye inversiones por más de 1.200 millones de dólares, tiene que incluir también un mejoramiento de la carretera que va desde el Enlace La Polvora hasta la Avenida Argentina, mejoramiento de señalizaciones, y de accesos a las poblaciones Rapa Nui, La Planchada, Sanatorio, O’Higgins, Polanco y por supuesto la bajada Santos Ossa, acceso fundamental para la ciudad y el mejoramiento de la calidad de vida de nuestra gente.

Junto con lo anterior, no es sólo la ciudad de Valparaíso la involucrada. También lo es Casablanca, y sus distintas localidades a lo largo de la ruta 68, pasando por Lo Vasquez, por la propia Casablanca, Tapihue, la Vinilla, Cuesta Zapata. Las comunidades no pueden ser ignoradas de manera tan flagrante ante un proyecto de esta envergadura. Nuestras ciudades, requieren un proceso de participación ciudadana efectiva, transparente y de cara a las comunidades involucradas, respecto de la nueva concesión de esta carretera, clave para el desarrollo de ambas ciudades y su futuro.

Valparaíso y Casablanca no pueden nuevamente volver a ser ignoradas en un proyecto de tan alta importancia para la región como lo es la nueva licitación de la Ruta 68. No podemos volver a perdernos esta oportunidad para mejorar los accesos a nuestras ciudades, y localidades rurales que se llevan las externalidades negativas de las autopistas, pero muy poco o nada de sus beneficios.

Exigiremos al MOP, junto a la comunidad organizada de ambas ciudades, que se lleve adelante un proceso de participación ciudadana efectivo respecto de la nueva licitación de esta ruta de vital importancia para nuestra región. No permitamos que la licitación de esta ruta, sea una nueva oportunidad perdida para nuestras ciudades y nuestra gente.