Diputado Giordano oficia a Impuestos Internos y a la Dirección del Trabajo por situación laboral de sacerdotes en la Compañía de Jesús
Exdirigente sindical y actual parlamentario afirmó que existen antecedentes que advierten una “situación grave de vulneración de la seguridad social”, que podría estar ocurriendo a nivel nacional.
Este miércoles, el diputado independiente de Apruebo Dignidad e integrante de la Comisión de Trabajo y Seguridad Social de la Cámara, Andrés Giordano, anunció el envío de un oficio a la Dirección del Trabajo para que informe sobre la situación previsional en que se encuentran los sacerdotes dentro de la Orden de la Compañía de Jesús, tanto quienes están en ejercicio como aquellos que decidieron renunciar a ella, y se encuentren hoy con lagunas previsionales.
Además, el parlamentario envió otro oficio al Servicio de Impuestos Internos, para conocer las circunstancias en las que se permite la actividad económica empresarial de las entidades religiosas en general, y especialmente, la Compañía de Jesús.
En su intervención, el ex dirigente sindical sostuvo que, buscando representar a quienes “bajo la figura de la ‘cooperación’ les han negado y vulnerado sus derechos a la seguridad social, a las garantías que ofrece el trabajo y la dignidad”, denunció una situación que enfrentaron ex sacerdotes de la Compañía de Jesús mientras sirvieron a ella y una vez que renunciaron, y con quienes se reunió previamente.
Se trata del no pago de cotizaciones previsionales en trabajos relacionados con la Orden, “bajo el voto de obediencia, o mejor dicho, bajo el poder de dirección laboral de la Compañía de Jesús”, que se sustenta en “la conveniente normativa constitucional que les reconoce a las instituciones religiosas la autonomía ‘para cumplir sus propios fines’,y de esa forma permitir que los rijan sus propias leyes fuera de nuestro orden estatal, negando el vínculo laboral hacia estos denominados ‘cooperadores’”, aseguró Giordano.
Esto último, indicó el legislador, amparado “en el insostenible argumento de que los sacerdotes que prestan servicios a las organizaciones religiosas se vinculan principalmente por el ideario que profesan, a la práctica del culto, sin que exista en Chile una ley que así lo determine, y olvidando -o queriendo olvidar- que como todos los demás que prestan servicios bajo un vínculo de subordinación, son trabajadores”.
Asimismo, Giordano aseguró que “según el balance económico de fines de julio 2015, la institución tenía a su haber 45 mil trescientos millones de pesos. (…) Es por esto que resulta aún más grave e indignante que, organizaciones que se benefician de exenciones tributarias, además lo hagan no reconociendo derechos laborales básicos, lo que por cierto, además significa que el fisco deberá hacerse cargo de las jubilaciones de estos trabajadores que han salido de la Orden, mal llamados ‘cooperadores’”, que están obligados a entregar a la institución “todo lo que reciben por vía de remuneración, estipendio o cualquier otro título, en un despojo total que enriquece a la Compañía a costa de su bienestar”.
“Estos antecedentes advierten una situación grave de vulneración de la seguridad social, que podría estar ocurriendo a nivel nacional”, agregó el diputado. Respecto a esto, el borrador de la nueva Constitución estipula que “las agrupaciones religiosas y espirituales podrán organizarse como personas jurídicas de conformidad a la ley. Respetando los derechos, deberes y principios que esta Constitución establece. Éstas no podrán perseguir fines de lucro y sus bienes deberán gestionarse de forma transparente de acuerdo con lo que establezca la ley”, lo que podría evitar que situaciones como éstas ocurran.